miércoles, 5 de septiembre de 2018


Cumpleaños 47 (1a. Parte)
Unos días antes establecí un plan A) A de antidecepciones: ir al cine y a comer sola como lo he venido haciendo los dos últimos años. Sin expectativa no hay decepción.
Pero como una treta de esas que acostumbra jugar el destino, un día antes el hombre del que estoy enamorada me escribe diciendo: "mañana es el gran día! Te adelanto unos besos" aquí cabe contar que nos vimos hace casi 5 meses tras los cuales veníamos no sé si aplazando no sé si arrastrando una promesa pendiente de tomarnos una botella de vino tinto. Así que entendí que al día siguiente nos veríamos y festejaríamos: mi cumpleaños, el reencuentro, el cumplimiento de bebernos la botella pendiente más 47 orgasmos que ofreció como generoso regalo de cumpleaños.
Así que este nuevo plan desplazó sin piedad a mi preestablecido y seguro plan A) Mala la hora en la que lo traicioné.
4 de septiembre.
Despierto 6:15 de la mañana gracias a que mi teléfono vibró por un mensaje, mi corazón saltó, de seguro es él ansioso por felicitarme!, primera decepción del día; era una ex compañera de la primaria que ni siquiera fue mi amiga, en fin esto no me afecta demasiado, el día apenas comienza!
Mientra me levanto en mi cabeza voy dibujando los dulces momentos por venir. Voy planeando los detalles, que me pondré? Vestido? Pantalón? De cualquier forma debo rasurarme las piernas y las axilas, recortar mi bello púbico que aunque no es mucho, después de haber visto hace poco la película de El último tango en París en donde la protagonista se pasea desnuda por las escenas mostrando un bello púbico tan abundante que podías pensar que traía colgando un gato negro, sale de sobra decir que me traumé. Continúo con mis planes mentales; terminar de barrer la terraza y sacudir las sillas y la mesa por si el clima es benévolo y nos permite tomar el tinto tomando el sol. Cuánta felicidad Dios mío!! Cuando mi madre me llame para felicitarme por fin podré decirle ya vez mamá al fin un cumpleaños feliz!!, te acuerdas que triste estaba hace 2 años? Ese cumpleaños que amaneció lloviendo y cuando me felicitaste yo estaba llorando porque tenía el corazón  roto y te dije que quería pasar mi día sola, y tú me contaste que cuando nací también llovía pero que fue uno de los días más felices para ti y que me amabas! Y qué todo iba a pasar... Sí, eso le contaré en cuanto me llame.
Qué feliz me siento con mis pensamientos mientras tanto ya barro la terraza...
Suena mi teléfono, será él? No es él, es el ex novio que me rompió el corazón hace 2 años al cual tras largo y doloroso proceso por fin perdoné. Me felicita, me manda buenos deseos y me dice: a ver si en la semana salimos a festejar, vamos al cine o algo... Yo con un poco de pena por él le digo: no creo que sea buena idea estoy comenzando una relación así que no creo que sea buen momento. El queda un poco sorprendido pero me dice no hay problema deseo que te festejen mucho! Y colgamos. Aquí cabe una observación. Cuando hago una afirmación temeraria como la anterior, sobretodo cuando es algo de lo que no estoy completamente segura, dentro de mi cabeza ocurre lo siguiente: despierta mi cerebro reptiliano que por cierto nunca me pierde de vista y cuya forma es la de un Velociraptor, y me voltea a ver con ojos aguzados como preguntando estás segura de lo que acabas de decir?. Perooo aún es temprano y estoy muy feliz así que lo ignoro y me justifico a mi misma, bueno es una mentira piadosa tal vez debí haber dicho estoy saliendo con alguien, pero ya es demasiado tarde para eso y tampoco es totalmente cierto, porque no he salido a ningún lado, solo hemos chateado, en fin lo importante es que ya no se haga ilusiones de un regreso yo ya estoy del otro lado en la acera con los enamorados no en la de los corazones solitarios. Mientras, ya estoy sacudiendo las sillas y lavando la mesa de la terraza...
Suena el teléfono, ahora sí es él!!
Bueno? -estas son las mañanitas que cantaba... Me canta las mañanitas me manda abrazos y besos y me desea que tenga un lindo día, no vendrá... Siento que mi corazón se va a romper, pero es imposible porque durante estos 5 meses me encargué de disolver la piedra que lo recubría, que lo protegía y solo me quedó un corazón suave, de carne viva, desprotegido, vulnerable... Tan solo ayer yo le decía no temas, la guerra terminó, la guerra terminó no volverán a lastimarte, confía... Y juro que mi Velociraptor no me miró... Pero son las 9:40 de la mañana del día 4 de septiembre del año 2018 mi cumpleaños número 47 y esto no se siente así... Otra vez parecen tiempos de guerra y desolación.

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